La bomba atómica es un piojo tuerto. El despelote inminente en Libia, desde MI lugar suena a algo lejano, inocuo, sin importancia. La guerra de las galaxias, fue sólo una tibia semblanza de ESTO. Malditos. Y ESTO sucede porque es la ley de la naturaleza, porque la vida es así, porque las mujeres somos así, o no my bitches?
La tristeza, la impotencia y una ira divina, bañan mi alma. Durante mucho tiempo quise ser parte del cliché, quise ser Whitney Houston cantando I will always love you, quise ser Heidi bajando las colinas suizas junto a copito de nieve, quise ser Dana Plato en Different Strokes, y no Dana Plato yonqui, porno star, en la miseria, suicida-asesinada.
Durante mucho tiempo, hasta que cumplí los 11 años JA. Ahí el mundo se me vino encima. Apocalipsis Now Redux. La Profecía. Quise alejarme del cliché, quise no gritar, no sufrir, no recurrir a los medicamentos, no carajear a nadie, porque me daba penita, porque me parecía digno el puto estoicismo, porque quería ser una sticker de los Muppet Babies.
Podría escribir los versos más tristes esta mañana, podría...
Cuando la cosa se puso color de hormiga, cuando tuve que gritar, putear, mandar a la mierda a todo mundo, cuando me doblaba sobre mi cuerpo de dolor, cuando vomitaba y me venían escalofríos, ya no era el sticker de los Muppet Babies sino la reencarnación de Linda Blair en El Exorcista. "Has visto lo que ha hecho la cochina de tu hija?" casi podía escucharse, tal cual en la película.
"Se le pasará cuando se casé, cuando tenga marido", dijo el médico con mirada enfática a mi escandalizada madre. Marido tus huevos cabrón!! Casamiento? Brincos dieras hijo de puta. Aquí se hablaba llanamente de una buena quebrada de catre. Obviamente había que esperar, tampoco estábamos en el oscurantismo medieval para "curarme" a tan temprana edad.
A los 20 el milagro llegó y una repentina calma se instaló en mi cuerpo. Fueron diez años de mierda, de retorcijones, de gritos, de conocer el infierno tan temido que finalizaban. Gracias a dios y al de abajo, el momento, el desflore sucedió y verdad, los violentos, encarnizados ataques pararon ante la dicha del catre mancillado. Luego vinieron años de tranquilidad, de dicha consumada, de paz (en ESE sentido). PERO nada dura para siempre, para siempre es mucho tiempo, para siempre es un regalo que NO es para los humanos...humanos...bah... especie maldita escupida por Dios.
HOY martes 22 de febrero del 2011, Pelotudo se asomó a la habitación en que yazco desvelada, pálida, ojerosa y sufriente. HIJO DE PUTA ANDATE!!! POR QUE NO TE VAS CABRON!!! ES TU CULPA, ME OIS??? TU CULPA PERRO DESGRACIADO!!!! ESTAS CONTENTO? ESTAS FELIZ??? estallé, y acto seguido me eché a llorar, mientras pedía a gritos que me enciendan el aire acondicionado, me tapaba con tres colchas, tomaba 3 Alcofen y un té de hierbas que se compra en Samaipata. Ayyyyy, si tuviera un fusil Sniper-M40A3...
Bello panorama.
Ojalá los hombres del mundo mundial ardieran en el infierno. Que ardan por bastardos, por afortunados, porque encima de TODO, no tienen que aguantar, que vivir ESTO.
Mientras tanto, deseo no ver un humano, UNO SOLO a 2000 metros a la redonda. Hoy soy Podrida Reloaded. PODRIDISIMA. Pueden meterse su simpatía por el orto, sus recomendaciones caseras allá mismo y cualquier otra opinión sobre mi holocausto hormonal, bien cerquita.
La sangre llegó al río. Sí, llega todos los meses, pero esta vez... tsunamis de dolor me atraviesan, y escribo afiebrada y jodida, sólo porque la laptop se pone caliente y asentarla en mi estómago me calma la zona de guerra.
La canción que dejo se ajusta a mi realidad tan bien como gordo en salvavidas.
Sí, estoy mal... Y QUE! PENDEJOS. Y QUE!
