martes, 26 de febrero de 2008

Las resacas

Me pudren las resacas
Anoche fue el cumpleaños del “costillar” y ante la perspectiva de tener que ofrecerme como regalo (el catre sigue intacto aún) me puse a beber como cosaco. Hacía como tres meses que no tomaba ni un sorbo de alcohol, entonces la huevada esa se me subió rapidingo.

Recuerdo que estaba eufórica, bailé cumbia, reguetón, cumbia villera, taquirari, saya y luego La pequeña lulu (sé lo que están pensando). Recuerdo a una hija de puta borrosa, que me retaba a tomar el “seco peinado” (vaciar el vaso de un trago, y para constatar que te lo has tomado todito, volcar el vaso por encima de tu cabeza).

Ya llevaba varios peinados, mientras rebotaba emocionada por toda la sala. El “costillar” se me acercó “cariñosito”, y yo no largué nada. O eso me parece.

Le dije varias veces “I LOVE YOU MOTHERFUCKER”, creo que a él, aunque también se lo dije a unas amigas. Pero la “señal”, esta vez no sirvió de nada.

En algún momento de la noche alguien me dijo: “Fulanita, ya vos estás chau” y me llevaron a un sofá donde feliz, dichosa dormité intermitentemente.

Desperté saninga, vi al resto de bellos durmientes esparcidos por la sala, eran las 8:10 de la mañana, y me vine a mi departamento. Todo bien. Desayuné tranquila y me di una ducha.

Luego me volví a dormir, he despertado recién y siento que el mundo se me ha caído encima. Una mierda total.

Nunca más en la vida sigo los consejos etílicos de esos cambas hijos de puta que están acostumbrados a tomar 10 secos peinados y al día siguiente como si nada. Menos mal que estoy de vacaciones.

Eso me recuerda, de verdad que tengo que contar mi sueño con Bardem y Fidel Castro.
Pero ahorita sólo quiero encontrar mi lugar feliz.

El último que salga que apague la luz por favor. Huele a martes…o es domingo?? Buenas tardes.

jueves, 21 de febrero de 2008

Enrique Iglesias y Asociados

Me pudre Enrique Iglesias…
Menos mal que ganó el que más me pudre de todos….
A ver, conocí al querido Quique allá por los años 90s cuando salió a la luz pública (maldito año) bajo esa horrorosa canción Experiencia Religiosa.

Bueno, debo reconocer que los New Kids on the block habían dejado su huella, muy cerca de la de Locomía, y otros nombres que de tan pelotudos, ya hasta me hacen subir los rubores. Después de atesorar abanicos gigantes y hasta prendedores con pequeños fantasmitas caribeños, descubrí que escuchar música de mierda no jodió tanto mi espíritu como para que pudiera gozar de los alaridos de Quiquín. Tampoco puej. Tampoco.

Según su biografía este camba es el resultado del cruce entre Julio Iglesias y la cojuda de Isabel Presley, cuyos genes arrejuntados han dado un extrañísimo resultado, (ver foto adjunta de Julio Iglesias Junior y Chabeli Iglesias). Menos mal que cerraron rápido la fábrica, porque hubiésemos estado cagados de verdad…el resto de descendientes de Julio Iglesias todavía no amenazan al mundo con su incursión artística y viven en un discreto anonimato (GRACIAS, muchas Gracias!).
El caso es que Quiquito veía a su papá irse de putas, subirse al escenario, poner la mano en el pecho y susurrar sus canciones con aZentito español, y claro, las cambas de la época ya nomás pelaban sus sostenes y sus calzones ante tamaño sex appeal. Seguramente Quiquito se veía al espejo con su verrugota, la cabezanga y los brazos largos, y pensaba: “mierda, debo tener algún talento”. Y claro, lanzó su primer alarido, se escuchó afinadingo y quedó convencido de que era cantante.

El culpable de semejante bochorno tiene nombre: FONOVISA. A toda esta tropa de hijos de puta sordos que componen esta discográfica se les ocurrió que Quiquito podía grabar un disco. Y señores, sorpresas de las sorpresas, GRABÓ un disco.

Y como en este mundo toda la basura vende (ya han visto cuántas visitas tiene este blog), pues Quiquito se convirtió en un éxito de ventas.

Hay pelotudos que no tienen buena voz, pero que intentan puej aprender a cantar…le sacan partido a lo poquito que tienen y saben hasta dónde llegar con el poco instrumento que Dios les otorgó. Quiquito no es de esos. Lo tengo presente cuando vino a Bolivia hace diez mil años, no recuerdo ni qué edad tenía yo en ese entonces, pero ya poseía uso de razón porque todavía, en las noches lluviosas, me persigue la escena de Enrique Iglesias trepau en el techo de ATB cantando a capella frente a un montón de bolivianas absolutamente sordas.

Por si su nula capacidad de cantar no bastara, Quiquito goza de un extraordinario sentido del humor, finísimo, que explota en las entrevistas que brinda donde da declaraciones pelotudas, que los periodistas ingenuamente publican para que luego este muchachón diga sin un ápice de remordimiento: “es que no entienden mi humor”.

Lo que nos puede dar una pista sobre sus dotes para socializar y su sentido de ubicación en el mundo es el extraño suceso acontecido en Viña de Mar 2001, Quiquito destruía tímpanos mientras el “monstruo de la Quinta Vergara” coreaba sus canciones. Al parecer todos estaban sordos esa noche y pidieron que se le entregue la Gaviota de plata. El chico de la verruga (que todos juran era un lunar), recibió el trofeo que dicen pesa alrededor de 3 kilos, y en un ataque definido más tarde como “agradecimiento”, Quiquito arrojo su Gaviota al público, yendo ésta a parar a la cabeza de una de sus fans que tuvo que recibir asistencia médica. Cecilia Bolocco (anfitriona de esa noche) corrió en sus tacos a recuperar el “galardón” e intentó disculpar al atónito Quiquín, ante el molesto público.

De ahí en más sabemos que: Quique rompe catre con la Anna Kournikova, que se sacó la verruga-lunar en otro ataque de sinceramiento consigo mismo (el mismo que le dijo que era cantante), que piensa seguir dedicándose a la música y que, si Dios es grande y benevolente, todavía no planea reproducirse.

Sus canciones? Una mierda total, no hablemos de que su voz parece como si estuviese estreñido, sentado en el baño, pidiendo un papel higiénico, sino las letras son en su mayoría plagadas de “profundas” metáforas: “Amarte es igual a perder a la ruleta rusa”; “loca tú jugaste al trapecista y sin red”; “por amarte robaría una estrella y te la regalaría” o espejos de la vida real: “Hay una cosa que te tengo que decir, mientras estabas lejos, otra estuvo aquí”…en general, si sos diabético, escuchar un disco de Enrique Iglesias te puede provocar una muerte segura.
Me pudre Enriquito Iglesias…(en realidad todos los Iglesias, pero este gana por goleada).

BONUS:
Cristian Castro:
A pesar de ser el único en la lista que sabe cantar, emputa porque teniendo una voz con un muy buen registro y color, el cojudo se dedica a cantar cuanta canción estúpida y de mal gusto le pongan por delante. Ahora anda dándole a las rancheras, con una pinta de ranchero gay teñido…Encima tiene la simpatía de Shirley Temple borracha y coqueada.

Ricardo Arjona: Dicen que este infeliz se dedicaba antes a los taxis y al básquet, habría que buscar al hijo de las mil putas que lo sacó del anonimato. Confieso que su primer disco me gustó (Animal Nocturno), pero que luego su música se tornó como un paseo que empieza en el Cristo del segundo anillo y termina en el Cristo del segundo anillo. Acordes iguales, metáforas forzadas y ridículas, todo esto coronado por un matrimonio fallido donde el hombre del romance es acusado de infiel y de violencia doméstica. "Te conozco desde el pelo hasta la punta de los pies"...Claro que la conocés hijo de puta, si le sonás que da calamabre. D-I-V-I-N-O.

Paulina Rubio: Mierda, esta cojuda tiene bonita voz cuando habla, pero cuando canta no zafa ni en el karaoke. No puedo decir mucho, porque la verdad hasta flojera me da opinar de ella.

Thalía: Me emputaba por sus papeles de ñoña en las telenovelas, donde siempre salía de empleada, de barcina, de pobre cojuda, analfabeta y cretina, que luego se enamoraba de un calzonudo hijo de mil putas que siempre, siempre se revolcaba con la mala y que luego de huevada y media, zass, la pelotuda lo recibía y la novela terminaba como si eso fuera la felicidad. Además, la cagó con sus últimos discos donde no se sabe para donde va. No canta tan mal, pero es más plástica que un juguete de la Cajita Feliz de McDonald.

P.D. Estoy atrasada con los e-mails, pero me pongo al día…esto de estar “cotizada” es grave (JA, alzadanga la camba).

P.D.2 Próximo post: tuve sueños rarísimos esta semana, el primero con Javier Bardem y el otro con Fidel Castro. Me pudre soñarme con “famosos”.

P.D.3 Más vale tarde que nunca, Youp me pasó un meme (ODIO los memes) pero como este sólo tiene una consulta (qué hacías antes de ser bloguera?) la respondo inmediatamente: Creo que no escribía tantos mails :p, en general, antes de ser bloguera, hacía lo mismo. JA.

P.D.4 Consulta de un lector: “Cómo hacés para detectar si un hombre sirve o no sirve?”. Respuesta: Sirve o no sirve para qué? Si es como pareja sencillo, espero 3 años y veo cómo es realmente. Si es para romper catre: si un beso no provoca nada, generalmente no sirve. Saludos.

viernes, 15 de febrero de 2008

San Valentín

Me pudre un montón San Valentín.
Es una fecha ridícula, que lo único que hace es ponernos en aprietos a todos. En aprietos porque no importa la fase de tu vida en que estés, este miserable día te convierte en un perfecto hijo de puta.

A ver, me explico. Cuando era joven (JA), y no conocía la macabra realidad que es la vida amorosa, estaba acostumbrada a todo tipo de presentes hechos por los pretendientes de turno: cartas, poemas, flores, joyas, peluches, etc… Tanta atención prodigada me hacía sentir WOOOWWW, pero al mismo tiempo me hizo gritarle a los cuatro vientos: “No me gustan las flores”. Qué cojuda no?.

El caso es que después me enrollé con el mal nacido de JG, y claro a este pelotudazo nunca le nacían las demostraciones de amor. Ejemplo:

San Valentín 1er año a su lado 2001:
Me pidió que vaya a encontrarme con él en la plaza y lo peor de todo, es que FUI. Ya allá, estaba el camba rodeado de un montón de amigos, me saluda, me presenta como su amiga y listo. Cuando ya nos despedimos y empezamos a caminar, se para frente a un puesto donde vendían unos peluchangos con globo, tarjeta y todo, fue tan hijo de puta que agarra uno de los cestos y me lo da. OBVIO que no me lo estaba regalando, era nomás su forma de decir: “ay cómo te quiero pelotudita”. El chistecito le pareció gracioso, mientras en mi mente pensaba: “Qué hago con este camba infeliz?”.
Bueno, el caso es que durante ese primer año, YO me ocupé de todo…cenitas con velas, regalos sorpresivos, etc…todo eso con el fin de sacar a este grandísimo huevón de la burbuja de pedos en la que vivía sumergido. Mi idea era: “Aprenderá”.

Pero no, queridos no. Lo más significativo que me dio fue una servilleta donde un día escribió: te quiero mucho mi amor.
Sé lo que están pensando….lo sé. Yo misma lo pienso ahora…

De ahí he tenido encontrones y desencontrones en los San Valentín. Después del termine con JG, quedé en un estado de miseria emocional tan desesperado, que el primer camba que me atendía bien y me daba flores, me parecía el hombre más bueno y decente del mundo mundial.

Una mierda, de no pensar siquiera en celebrar un San Valentín, pasé a esperar esa fecha con ansias para ver qué carajos pasaba, y si el cojudo de turno me quería lo suficiente para “demostrarme su cariño”.

O sea, “dejemonos de chiveríos!!!!!!” me dije un día hace ya dos años. Me miré al espejo totalmente emputada y me grité unas cuantas verdades, entre las que incluía: DEJA DE HACERTE LA VICTIMA!, SOS UNA PELOTUDA!, REENCONTRATE CARAJO! y otros…

Y desde entonces decidí no festejar San Valentín NUNCA, porque en primer lugar es una mierda de celebración que te obliga a mostrar un amor que supuestamente deberías mostrar siempre. Así que aquí un AVIVOL para los cojudos que leen esta mierda de blog: Queridos, si la única fecha en que sus hijos(as) de putas se portan bien es el 14 de febrero, tienen un GRAVE problema.

Segundo AVIVOL, los peluches, las flores, las serenatas, las cenas, después de todo no indican nada, a menos que lo haga en una fecha "normal", lo demás es expresión del consumismo.

Aquí otro AVIVOL para los cojudos que festejan esa mierda de fecha y cualquier similar (23 de julio, 21 de septiembre), hay una cosa importante con relación al “detalle”, o sea…si vas a unirte en el alboroto del I love you valentinesco, porqué no regalás algo que a tu pareja le guste?, pero que de verdad le guste?.

Tuve otro cortejo, boluuuuuudoo pero muy buena persona, que siempre me regalaba huevadas que no tenían nada que ver conmigo, y cuando las veía rodando en mi casa me decía, “por qué no me lo das a mí, yo le voy a sacar provecho”. Claro el camba iba a comprarme una bufanda color mostaza, que a él le encantaba, que tenía cierto toque masculino, y me la daba. Como yo no la usaba, me decía que se la dé para que la use. Seguro puej cochi!. Regalame algo que me sirva, cabrón!.

Eso me recuerda, a las boludas que leen esta mierda de blog, hijas…tienen idea del porcentaje real de hombres a los que les gusta los peluches y adornos cursis??????. Debe estar entre el 1% y el 0%. Cuántas veces he acompañado a amigas a comprar peluches para los cortejos!!…me quiero cortar una teta che. Si esos cambas después usan esos peluches para regalarlos a las cholas de turno (experiencia real).

Ayer, día de San Valentín, el Costillar llegó con una flor…y luego pensando que el momento ameritaba una buena quebrada de catre, empezó a meter mano. Me reí en su cara y le dije “Carajo, vos pensás que por una flor voy a romper catre como coneja con vos?”. Le dije que se deje de huevadas, que aquí no estábamos en suelo americano, pero que qué bonita su flor (refuerzo positivo) y que miremos una película…

No pude evitar sentirme algo triste. Pequeñas y grandes insatisfacciones salen a la luz gracias a ese día de mierda. Hoy me llamó una amiga, hundida en la más absoluta depresión…anda sin cortejo, sin amante, sin perro que le ladre…y ayer, en su oficina, empezaron a llover las flores y los peluches para sus colegas de trabajo.

Esa es la gran pregunta, y los que pasan ese día rodeados de corazones de helio, de peluches, de flores, de chocolates, de cenas a la luz de las velas, de otros hijos de puta que fingen que el amor existe…?? Que pasa con ellos? Con los que reciben las flores, los peluches, sabiendo que su cortejo/novio está encholado, o tiene un hijo con otra?? Con los que tienen cortejos y estos nunca demuestran su amor?? Con los que ven ante sus ojos toda una mercadotecnia que vende el concepto de 2, donde el 1 tiene un futuro de miseria y desgracia?. No señores, este día nos hace un flaco favor a todos.

A mí, porque ya perdí la capacidad de creer en un amor puro y genuino. La fecha me hace preguntarme si hay pelotudos realmente felices…y la vida, siempre me dice que no. Buenos días.

domingo, 10 de febrero de 2008

Carnaval. Parte 2

Este post no estaba entre mis planes, pero la desgracia quiso que pudiera escribir otra vez sobre el tema.

En primer lugar, sepan todos que además de podrida ando medio sorda del oído izquierdo y todo gracias a unos cuantos borrachos malditos, roñosos, que tuvieron el mal tino de meterse conmigo.
Resulta que el último día de esa cada vez más horrorosa fiesta llamada carnaval, se me revolvieron las tripas gritando “Anticuuuucho, antiiicuuucho”, y promediando las 20:30 horas, la podrida (Yo) y su recién adquirido cortejo (El), se fueron a comer Anticuchos al barrio Hamacas.
Antes de que pregunten y de que se armen sorpresivas teorías, mi nuevo Costillar no es tan nuevo…o sea, volví con JG, JA! Seguro puej cochi!. No, no es tan nuevo porque a este cojudo lo conozco desde hace 10 años, él siempre (dice) sintió algo por mí, pero recién hace un par de semanas lo empecé a mirar con ojos de lujuria y camotera, en ese orden. El catre? (para los chismosos), nada, todavía cero, así que de aquí a unos dos meses sabrán, QUE TAL ESA!.

En fin, el caso es que estaba con el Costillar comiendo anticuchos en el barrio Hamacas, al promediar las 20:30. Como ese tugurio tiene mesas afuera, y yo me sentía contenta por todo: la noche, el aire fresquito, la finalización de la fiesta esa, el Costillar, los anticuchos, etc…nos sentamos a la intemperie.

Y ahí estábamos rememorando sobre la vez que me caí de nariz en un recreo del colegio y la falda se me levantó hasta tapar mi nuca, o de esa otra vez en que me agarré a puñetes con un hijo de puta que le estaba sonando a mi mejor amiga, o de esa vez que hice un test picante y lo repartí por todo el colegio, y en la pregunta de si se metía mano él respondio: JAMAS!. y yo me cagué de risa en su cara. Sí, mierda que eran buenos tiempos.

Todo eso bajo la luz de las estrellas y el vientito, cuando de pronto…sin previo aviso…ZASSSSSSSS! El globazo en la oreja. Me atufé enteringa, parpadeé y me llevé la mano a la cara, para sentir un líquido asqueroso chorreándose y ver pasar una camioneta donde todavía pude detectar la cara riendo del pelotudo hijo de las mil putas que me había lanzado esa mierda. Habían como 5 personas más, dos de ellas niños entre los ocupantes del auto.

AH no!, ah, no!...me emputé tanto, que mi reacción fue instantánea, ahora narrándolo hasta parece en cámara lenta, pero todo fue cuestión de segundos. Me levanté al tiro, tumbando la silla, y dejando a todos con la jeta abierta, agarré mi llave y me subí volando a mi auto que había estacionado al lado de la mesa.

Vi que siguieron recto hacia el segundo anillo y pisé acelerador a fondo. Estaba cabreadísima, creo que no me cabreaba así desde la vez que dejé botau a JG en la ruta a Samaipata. Encima entre la furia, comenzaba a sentir un dolor irritante en la oído.

Recuerdo que no pensaba nada, hasta que me acordé que una amiga vivía en la esquina de la rotonda del segundo anillo de la Beni, le pegué el celularazo, mientras alcanzaba a esos hijos de puta, y le dije que ella y todos los cambas que estén en su casa salgan a la esquina a ayudarme, no di mayores explicaciones y colgué.

Ya en la Beni, los alcancé y los pendejos al verme empezaron a reírse con ganas, eso me rayó más, mientras mi celular sonaba insistentemente (El pobre Costillar que había dejau sentado en la mesa de los Anticuchos). La ira me cegó tanto que aceleré más y ya bien detrás de ellos, empecé a bocinearlos como descocida. Hice un escandalazo de aquellos, ahí ya las caras se transformaron y empezaron a verme con miedo, claro…yo estaba con un dolor en el oído asesino, y un empute, asesino también.

Como ellos no iban rápido, hasta dos empellones les di para que se detuvieran, valiéndome una mierda si en esa acción se destartalaba mi parachoques. Tranquilos que todo esto no era peligroso para los cojudos, porque los empellones apenas los batieron. El caso es que al darse cuenta de cómo venía la mano, justo se pararon en la esquina de la rotonda de la Beni. Se bajaron dos cambotas grandes, mayores que eran los que estaban en el asiento de piloto y copiloto. Antes de bajarme del mío llamé otra vez a mi amiga, y le dije que llame a tránsito, y al Costillar también.

El oído izquierdo en ese momento lo tenía totalmente tapado, y un dolor punzante me salía desde dentro y se extendía a la cara, porque el globazo fue tan fuerte que hasta morete me salió en la cara…sin contar la pintura asquerosa que le habían echado.

Me bajé fúrica, sabiendo que si perdía presencia, esos cojudos iban a querer pasarme por encima.
- Quién fue! A ver, que se baje el irresponsable, desubicado, que me tiró el globo!
Dije de una.
- Niñita, pero si no ha pasado nada…
Dijo el que manejaba la camioneta.
- No ha pasado nada??? Me va a acompañar ahoringa usted y todos estos cojudos a Prosalud a que me curen el oído oyó?! Qué ejemplo le da a estos pobres chicos!
Grité apuntando a dos peladitos que estaban entre los 13 a 15 años.
- Oiga, no sea escandalosa…aquí no ha pasado nada, es carnaval…
Dijo el otro, el copiloto. En ese momento llegó mi amiga acompañada de 8 cambas, que habían estau en su casa comiendo churrasco.
- Fulanita qué paso!!!- me preguntó preocupadísima.

Estaba tan emputada y el oído me dolía tanto que me puse a llorar en media calle, y entre sollozos y agarradas de oreja conté a mi amiga, a los 8 cambas, y los cuatro gatos de la calle que se acercaron ante el alboroto, lo que había pasado.

Ahí empezó una discusión de ambos bandos, en que todos los presentes me defendían a mí, ni siquiera los pelaus, entre los que se encontraba el lanzaglobos, decían nada, eran los dos señores que además, estaban tomados, los que discutían…

En eso llegó el Costillar y una moto con un paco. El costillar atestiguó lo relatado e inmediatamente intentó apaciguar aguas, sin dejar de darme la razón. El paco pidió “so brevet”…y yo después de largar el mío, apunté: “Y háganos el test de alcoholemia a los dos, y a los otros cambas si quiere”

La cara del pelotudo de la camioneta era un poema, porque obviamente que el test de alcoholemia no lo pasaba ni cagando.

- No pienso gastar un peso en hacerme ver el oído, estos cojudos tienen que pagar todo…
Dije emputadísima…
- Además, señor oficial, mire, mire cómo a estos cambas ni vergüenza les da!!
Era verdad, más que vergüenza estaban con miedo, un miedo donde se leía el resentimiento por todo el escándalo que les había hecho, como si fuera culpa mía que los viejangos se pongan a lanzar globos a gente que está comiendo.
- Es más ahoringa llamo a mi abogado, para que nos dejemos de huevadas…
Empecé a marcar mi celular, ya nomás intentando contactarme con mi abogado…, el señor oficial se puso a hablar aparte con los otros dos cambas de la camioneta y no sé cómo o qué les dijo, que acordaron llevarme a Prosalud de la Alemana y ver qué me había pasado.

Para hacerla corta, fui a Prosalud, me vieron el oído, el médico dijo que mi tímpano no reventó de milagro y que iba a tener problemas para escuchar por lo menos una semana, me dio analgésicos, unas gotas pa ponerme cada ocho horas, y otras huevadas más. El chistesito costó, con las medicinas, más de 50 dólares. Plata que no puse ni cagando.
Los cambas desgraciados que me jodieron la noche y la semana, nunca, y léanlo bien NUNCA me pidieron disculpas, pagaron los gastos con la jeta larga y yo con mi jeta larga los dejé ir, no senté denuncia ni nada, por consejos del “señor oficial”, que asumo llegó a un “arreglo” con los otros cojudos. Me vale mierda de todas formas, no tenía ganas de verles las jetas de nuevo.

Al día siguiente, recién me enteré de todos los despelotes que hubieron, del pobre cojudo que dejaron en coma una tropa de borrachos malditos, o del otro al que le arrancaron la nariz, o de los que mataron en asaltos, así que pensé que después de todo tuve “suerte”. Vi toda la semana a la vieja, la madre del Fernando Blanco, el principal golpeador del que quedó en coma, salir en tele y en periódicos, fresca como una lechuga hablando de que todo fue una cosa de “mala suerte”, y que su hijo era un buen chico, que tenía sus problemas. Pa rematar, ayer o antesdeayer la vieja dice que se está cabreando porque después de pagar casi 10.000 dólares en tratamiento para el tipo que su hijo dejó en coma, no ve “predisposición” de la familia del afectado para que el hijo de ella evite la cárcel. Déjeme decirle señora de Blanco, que usted sólo está haciendo lo que es su DEBER hacer, y la familia del afectado no tiene porqué sentirse agradecida. Su hijo descalabró a un tipo, y él o la familia de él, tienen que arreglarlo. Tan sencillo como eso.

Estoy emputadísima, y mi oído sigue inflamado, aunque el morete ya casi desapareció. Nada gente, cosas del carnaval…dicen.

martes, 5 de febrero de 2008

La celotipia

Me pudre la celotipia.
Me llamo fulanita de tal y padezco celotipia. Llevo 3 años “sobria”.
Esa sería mi presentación si estuviera en una jodida reunión de Celosos Anónimos.
El avezado lector que me pidió meter mano a este tema, no tiene ni idea de la caja de Pandora que vamos a abrir en este momento.

Esta mierda de los celos se agigantó proporcionalmente con los cuernos obtenidos en mis primeros encontrones amorosos (cuándo no, JG). Haciendo un retroceso histérico, ya he comentado que solía ser más cursi y ñoña que Hello Kitty compartiendo con Winnie Pooh en un té piñata. Una pobre cojuda, cuyo soundtrack de vida sería “bruta ciega sordomuda” de Shakira. Pelotudaza a morir.

Luego llegó el hijo de puta, malnacido de JG y mi otrora buen espíritu, se pringó de las aguas oscuras de la infidelidad. Este post lo voy a llenar de ejemplos, porque mierda, es la única manera de dilucidar bien un proceso de pudrición como este.

ACTO 1: Protagonistas: JG y la ÑOÑA
JG y la Ñoña paseando por el centro de la ciudad, están caminando por la plaza, y de pronto ZAS!!! Se aparece una señorita, de buen ver, que exclama alborozada: JGG!!!!!!!! Y se bota encima de JG a abrazarlo, con una felicidad tal, que la ÑOÑA se ruboriza. JG presenta a la ÑOÑA como la ÑOÑA, no como: “Esta es la ÑOÑA, mi CORTEJA”, nop, ÑOÑA a secas. Charlan un rato, quedan en tomar café y listo. JG y la ÑOÑA continúan caminando, mientras la ÑOÑA musita tímidamente: “Qué simpática la chica, y se ve que te estima harto”….JG cuenta alguna anécdota de cómo se hicieron amigos y no se habla nunca más del tema.

Nota: Qué pelotaduza la ñoña de mierda no?.

ACTO 2: Un año después: Protagonistas: JG y la celosa Amateur
JG le dice a la celosa amateur que tiene que viajar a Samaipata de fin de semana. “Es sólo trabajo”, insiste. La celosa amateur, que hasta el momento no ha sabido de los cuernos, pero que ya sospecha, le dice: “pero van a ir dos personas más que se pueden ocupar, porqué tenés que irte justo ahora que te necesito?” (El hermano de La celosa Amateur estaba en el hospital). JG se va igual y La celosa Amateur se queda desconfiada, dolida, y algo emputada. Cuando el cabronazo de JG regresa una semana después sin haber llamado por teléfono ni una sola vez, La celosa Amateur se sienta pacientemente a preguntarle si hay alguien más, y si realmente él está seguro que quiere estar con ella, que no sigan perdiendo el tiempo, bla bla bla y más bla. Toda esta charla boluda, con bonitas palabras, frases semi-ñoñas, que terminan con besos, catre y otros.

Nota: no hay palabras para describir la estupidez de la celosa amateur.

ACTO 3: Al tiempito, descubiertas 3 infidelidades: Protagonistas: JG y la Celosa Avanzada.
JG y la Celosa Avanzada comiendo una pizza. De pronto se acerca a la mesa una tipa X. Esta tipa X saluda alborozada a JG. “JGG!!!! Cómo estás!! Casi no me di cuenta que eras vos!”, JG saluda y presenta a la Celosa Avanzada, pero la Celosa Avanzada se cabrea tan rápido que no cacha ni el nombre de la fulana, ni cómo la presenta. La tipa X le dice a JG: “Te presento a mi madre”, y vuelca hacia una señora a la que le dice: “Este es JG”. JG le pregunta a la tipa X sobre su pareja, porque al parecer lo conoce. Charlan un rato más y la tipa X se despide.

Hasta ese momento la Celosa Avanzada no ha dicho ni pío, mientras en su mente piensa: “Maldito, promiscuo, puto, resbaloso, roñoso de JG”. Ella sigue en silencio. JG finge que no pasa nada, hasta que cuando tienen que despedirse, pregunta: “Ahora qué”. La Celosa Avanzada dice muy rencorosamente: “Nada, total… a mí ya ni me importan esas mierdas tuyas”. JG pone cara de circunstancia y alega: “Si no te importara no estarías así, qué pasa, decime”. JG sabe exactamente qué pasa, pero no quiere sacarlo a colación él.

La Celosa Avanzada dice escuetamente: “Nada…esa tu amiga puej”. JG suspira y dice ofendido: “La tipa X es la mujer de mi amigo Mengano! Cómo se te ocurre!”…La celosa Avanzada se emputa y espeta: “Eso nunca te ha frenado! Además, todas las otras dizque eran casadas o comprometidas, y luego resultaba que estaban separadas. Pero te voy a decir algo JG. NO ME IMPORTA! Oíste no me importa!! Esas mierdas tuyas me tienen podrida, siempre vos con tus fulanas, a ver decime, DECIME en qué tiempo rompés catre con esa tipa X, en qué tiempo, porque lo pienso, lo pienso y lo repienso, y no veo el momento en que podés hacerlo, si vivimos casi prendidos vos y yo oye, pero sabés qué, lo importante cojudo es que NO me importa y algún día me voy a cansar de que no me importe y me voy a ir, me voy a ir y no me vas a ver nunca más, nunca más en tu puta vida, y no te voy a mandar ni siquiera una miserable postal. OISTE! Pero no me voy porque no me importa! Me importa una mierda los catres que rompés con la tipa X, ojalá que te aproveche cabrón, porque de verdad que no me importa una mierda, antes me importaba, pero ahora ya no, así que podés hacer lo que querrás y estar con esa tipa X todo lo que te de la gana, tenés hasta mi bendición, porque no me importa nada”, y luego de semejante discurso, largarse a llorar desconsoladamente.

Nota: Quizás ese hubiese sido un buen momento para a) dejarlo b) buscar psicólogo-psiquiatra-cura-santero-amigo-perro o alguien que me ayude o c) optar por los analgésicos.

ACTO 4: (existe un Acto 4!) Los últimos tiempos de esa relación: Protagonistas: JG y la Celosa Patológica-Freaky
Después de descubiertos los cuernos finales con la vieja gorda de apellido italiano, la Celosa Patológica-Freaky, anda que no la calienta el sol. Hay días buenos, hay días malos. Más malos que buenos, un día de esos se despide de JG y antes de irse a dormir decide llamarlo para darle las buenas noches. OH! Sorpresa, el celular de JG está ocupado. La Celosa Patológica-Freaky mira la hora y ve que son las 23:30, se pregunta con quién mierda habla JG a esas horas y empieza a marcar el número otra vez, para recibir el mismo tono ocupado.

La Celosa Patológica-Freaky sigue marcando el número durante 50 minutos, porque quiere descubrir exactamente cuánto dura la llamada. En ese momento ella piensa: JG estuvo al teléfono 50 minutos. A JG no le gusta hablar mucho por teléfono. JG es tacaño con su crédito, así que la llamada no la hizo él. Quién gastaría plata en una llamada a celular durante 50 minutos?. Respuesta: una mujer. Esa mujer no soy yo, ergo, tiene chola. La Celosa Patológica-Freaky, llama de nuevo y JG responde soñoliento. “Hecho el que estaba durmiendo el camba de mierda”, piensa ella.

JG estoy stressada te puedo ir a ver, tuve un problema”, le dice. “Sí mi amor, claro, ven”, responde él dizque preocupado. La Celosa Patológica-Freaky llega a toda mierda al departamento de JG, y lo primero que hace es decirle: “Te estuve llamando desde la 23:30 y siempre dio ocupado. Eso hasta hace un rato”. JG que salió en shorts a ver qué pasaba, la mira con los ojos chinos, sin saber de qué mierda habla: “Pero fulanita, mi celular ha estado cargando, no sé de qué hablás”. “Mira JG, ya estuvo bueno de esta comedia. De verdad que ya me tenés podrida, si querés estar encholado toda tu vida, es tu problema. Yo ya bajé los brazos. Me vale una mierda, de verdad. No voy a llorar, no voy a hacer nada, me vale una mierda. Si lo que decís es verdad, lo siento. Si no, cojudo, tenelo por seguro que te voy a pillar. Y ahora sí que te vas a arrepentir”. Dicho esto, partió del lugar. Eso fue una semana antes del termine definitivo.

Y bueno, padecí de una celotipia jodida, y fue algo que surgió de un momento a otro y que fue creciendo sin darme cuenta. He aquí la lista de la vergüenza:
- revisé celulares, hackeé correos, marqué a números desconocidos de su lista de llamadas recibidas y números marcados para ver si contestaban mujeres, alguna vez me di vueltas por donde yo pensaba que estaba para ver si era verdad, contacté por Chat a las supuestas amantes para sonsacarlas sin que sepan que era yo, revisé su basura del baño para ver si pillaba condones o cualquier cosa rara de Otra mujer, olí camisas, ropa, cuellos, manos buscando indicios, lo celé con mujeres, hombres, amigas, familiares, etc... Lo único que no hice fue seguirlo, ni ponerle detective, aunque fue un pensamiento largamente acariciado.

Frases surgidas de una crisis de celotipia profunda:
- Mirá que cualquier rato se me va la olla y meto tu quinto índice en la licuadora.
- Lorena Bobbit me susurra cosas malas, muy malas
- Te odio, si no te dejo es por mí, no por vos hijo de puta.
- Espero que hayás usado condón.
- Algún día voy a escribir una historia, donde seás el protagonista y te maten como el perro que sos. (Esta última surgida luego del último descubrimiento).

Luego que se terminó esa joda, me di cuenta que era una mierda total. Así que intenté hacer auto-terapia, pensando en todos los cojudos buenos y bien portados que conozco, pensé en lo lindo que es tener una relación sana y adulta, lo pensé muuuchoooo y llegué a la conclusión que no tenía un solo modelo mental para afirmar todo eso.

Entonces pensé en mí, y me dije que no iba a permitir que ningún enfermo, ninfómano, desvergonzado, estéril emocional, patológicamente inservible cojudo, me joda la vida haciéndome perder mi tiempo en esas ridiculeces. Me quedaron unos cuantos vestigios, pero déjenme decirles que desde hace tres años no revisé ningún celular, ni hackeé cuentas, ni nada parecido, puedo decir que aparte de la nube negra y hedionda que suele ser mi carácter, en general he sido un dechado de buen comportamiento no-celoso.

Tampoco tolero a los que son celosos conmigo, porque yo siempre he sido intachable como pareja, eso lo pueden atestiguar un montón de hombres JA!. Y cuando me llegan esos Celosos-Patológicos-Freakys, los freno en seco diciéndoles: “Oí cojudo, te vas a curar esa mierda, porque no tengo la culpa de los traumas que te haya dejado alguna cabrona

Lope de Vega dijo: “Celos son hijos del amor, mas son bastardos, te confieso”. Me adhiero a lo de bastardos.

Me pudren esos bastardos.