El espinoso tema de la "virginidad"

Me pudre el tema de la virginidad.
O sea, por qué la gente no pregunta sobre la primera vez que te bajó? O la primera vez que tuviste sexo oral? O la primera vez que descubriste cuál era tu punto G? o la primera vez que viste uno tan chiquitito que te pusiste a llorar?.

Definitivamente el temita de la virginidad está sobrevalorado. Debería ser, aunque de hecho es, algo muy natural. Generalmente, los catres más memorables han sido otros. Es más, tengo historias divertidísimas sobre la ocasión en que me vestí de gatúbela y cuando me agaché se rajó todo el traje, o cuando durante una buena quebrada de catre, salió un extraño sonido similar a un gas, que NO era un gas, que me acompañó durante todo el día, y que incluso al ir a una librería y agacharme a ver unos estantes de abajo, zas se repitió la misma oda a la vergüenza. O las mil y una cosas que se pueden decir cuando el soldadito cae durante el fragor de la batalla. O las mil y una cosas que se pueden hacer cuando una, como mujer, no tiene ganas que un hijo de las mil putas, que en ese momento es cortejo, amigovio, amante, marido, te toque ni con un rayo láser. Sí puej, hay cosas más memorables.

Pero para los que quieran saber, el día que perdí la virginidad no me sentí nada diferente. Según mi círculo social, el camino ya estaba en estado claustrofóbico de tanto que me atrasé pa consumar la “alegría” de ser mujer. Mis más allegados, hacían chistes opas sobre la posibilidad de ofrecer mi himen a un anticuario, o de romper esa huevada con alguien “que sepa”, decía una hija de puta cuya agenda negra estaba repleta de hombres sabios. Mi mejor amigo le prodigaba curiosos y geográficos nombres: El estrecho de Magallanes, La línea del Ecuador…etc..

Claro que la ñoñez que me adornaba, escogió el sexo con amor para tan memorable ocasión. Es así que luego de casi un año y medio de metidas de mano, calenturas e inspecciones dactilares, JG me llevó a un motel.

Hacia allá fuimos en taxi, cosa que entendí al tiempito…y después de unas cuantas vueltas entramos a un tugurio llamado Hyaat Motel (no estoy segura si se escribe así). Ese día traía el cabello totalmente cepillado, por lo que la ansiedad de verme “apunto de” y encima “ahí”, hizo que cubriera mi rostro con un manto rubio.

JG afirmaba que era el mejor lugar, y que a él lo habían llevado varias veces. Nótese que no es lo mismo llevar que ser llevado. A mí, por ejemplo, me llevaron. JA.

Con ese clima “romántico” entramos a una habitación en la que emocionada vi espejos en el techo, jacuzzy redondo y otras cosas que me causaron honda diversión. Me sentía parte de una película de Almodóvar. Reboté en la cama, también redonda, imaginando cándidamente de cuántos revolcones había sido testigo esa habitación.

JG con esa inspiración galante y la gracia que rebosaba por toda su delicada persona me dijo: “Tenemos sólo una hora, porque el taxi va a venir a buscarnos”. Lo miré parpadeando y ya nomás pelé el liguero. JA! Creyeron que después de tanto tiempo iba a estar esperando mansamente lo que sucediera?.

Una mierda. Rompimos catre durante un rato. Sentí dolor porque ese cojudo era medio animal para contenerse, pero no sangré. El acto en sí no fue memorable, no me sentí diferente, quizás más “dolorida” que de costumbre, pero nada más.

Hubo palabras de amor, y claro está el consabido “quiero terminar dentro tuyo…pero sin condón”….yo me decía “qué hijo de puta”, pero entre las sábanas y los cuerpos calientes, apenas musité “tan bellaca no soy”.

Me cautivaba nuestra imagen en el espejo, y recordaba a una amiga decirme que mientras más tardara en librarme de ese “trámite”, más difícil iba a ser que me guste. En ese momento no pensé: “Carajo que valió la pena la espera”, pero tampoco me desagradó. El orgasmo brilló por su ausencia, y empecé a preguntarme si había pasado y no me di cuenta. Tocó la hora de marcharse, me vestí, lo miré vestirse…me dijo: “No tengo cambio, tenés 50 pesos?”, busqué en mi cartera, le di el dinero, se abrió una pequeña ventanita que estaba dentro de la habitación…una persona en la oscuridad cobró y el taxi vino a recogernos.

Qué historia del orto no?. Lo único importante de resaltar de esa noche, es que al fin se rompió esa huevada y se me cayó un mito largamente adquirido. A ver, ya he dicho que era algo “ingenua” en esa época, quizás hasta estúpida, porque cuando la gente hablaba de que “se le paró”, “la tenía parada”, o “no se le paró”, en mi mente se formaba una imagen que nada tenía que ver con la realidad. A continuación, exhibo mi primera obra tecnológica, van a ser los primeros en ver un Podrida versión multimedia:

A la izquierda ven la imagen de lo que yo me imaginé era una erección. AVIVOL para las virgencitas, la imagen de la derecha es la correcta. Se imaginan la sorpresa que me llevé? JA!.

Y bueno, por lo menos zafé de esa. Lo interesante de la virginidad es que es un tema tan sobrevalorado, que en este pueblingo hay cambas astutas que se las charlan a sus cortejos, y los brutos ni se dan cuenta de cuándo una cojuda es virgen o no. Aquí se aplicarían las teorías bíblicas en que se basa la fe, creer sin poder estar seguro de que existe o no existe JA.

O como en mi caso, que para el camba hijo de puta sos virgen cuando le conviene. Todavía recuerdo a JG cuando después de una de sus múltiples cuerneadas, en un buri...yo lloraba al calor del trago junto a una amiga, y le comentaba "y eso que fue el primero"...a lo que un JG muy descarado contestó: "No he sido el primero, ha tenido otros cortejos".

Ahí fue cuando supe, a ciencia cierta, que el tema no es ni siquiera a quién "dárselo", sino que uno lo disfrute y quiera hacerlo, sin importar lo que piensa un camba de mierda, ni una sociedad careta y culeadora como la cruceña.

Así que mis adoradas féminas, vírgenes y no vírgenes. El cuerpo se comparte con el que a uno le da la regalada gana. Cuando a uno le da la gana, de la forma que a uno le da la gana, y preferentemente protegida con condón, anticonceptivos, espuma, T de cobre, y cualquier otro medio humano o divino, para no cagarte la vida atándote a un imbécil malnacido porque te quedaste encinta.

Esito sería. Esta semana me soñé con Ricky Martín, lo triste del sueño? estaba en onda gay. JA. Me emputa soñarme con famosos y eso me recuerda, que me reemputa Harry Potter. Acaba de llegarme el último tomo y estoy cabreadísima. Ojalá ardás en el infierno Rowling.

P.D. A la amiga española que tuvo la desgracia de contactarse por internte con un especimen made in bolivia de bajos estándares de calidad, le tengo que decir: Te has topado con un camba lizo. Mejor saberlo ahora que después de que te hayas tenido que pagar VOS el pasaje pa venir a conocerlo, o pa llevártelo a españa. Un caballero JAMAS debe mandar a la mierda a una dama. Da como para sacarle la mugre al camba ese. Buscate alguien que te merezca y con quien no tengás esos problemas, que generalmente acaban en una vida desolada y un catre miserable.